La visualización creativa es la técnica de utilizar la propia imaginación para crear lo que deseas en tu vida. No hay nada totalmente nuevo o extraño en la visualización creativa. La usamos todos los días, a cada momento. Es nuestra natural capacidad de imaginación, la energía creativa básica del Universo que utilizamos constantemente, aunque no seamos conscientes de ello.
La visualización creativa trata de estimular nuestra imaginación natural de un modo consciente, como una técnica para crear lo que verdaderamente deseamos: amor, realización. goce, satisfacción, relaciones, trabajo gratificante, expresión de uno mismo, salud, belleza, prosperidad, paz y armonía interior... en suma, todo lo que nuestro corazón pueda desear. El uso de la visualización creativa permite acceder a todo lo positivo y a los dones que fluyen naturalmente de la vida.
La imaginación es la capacidad de crear una idea o imagen mental. En la visualización creativa utilizamos nuestra imaginación para crear una imagen clara de algo que deseamos se manifieste. Luego, seguimos centrándonos en la idea o imagen de manera regular, comunicándole energía positiva hasta que se convierte en una realidad objetiva... En otras palabras: hasta que conseguimos materializar lo que hemos estado visualizando.
Nuestro objetivo puede ser de cualquier tipo: físico, emocional, mental o espiritual. Podemos imaginamos a nosotros mismos en un nuevo hogar, con un nuevo empleo, o teniendo una hermosa relación, o experimentando una sensación de calma y serenidad, o viendo mejorar nuestra memoria y nuestra capacidad de aprender. También podemos imaginarnos manejando sin esfuerzo una difícil situación, o, simplemente, vernos radiantes, llenos de luz y de amor. Podemos actuar a cualquier nivel, y en todos ellos conseguiremos resultados. Luego, con la experiencia, descubriremos las técnicas e imágenes que, concretamente, nos resulten mejor.
Pongamos, por ejemplo, que tuviésemos una relación difícil con alguien y deseásemos crear un clima de mayor armonía con esta persona. Supongamos que es usted quien tiene el problema. Relájese, hasta conseguir un estado mental profundo, sereno y reflexivo. Imagínese mentalmente relacionándose y comunicándose con esa persona de una manera abierta, honesta y armoniosa. Trate de llevar a sí mismo la sensación de que su imagen mental es posible y experiméntela como si realmente estuviese sucediendo.
Repita este breve y sencillo ejercicio a menudo, unas dos o tres veces al día, o siempre que piense en el tema. Si usted es sincero, y se siente verdaderamente dispuesto a un cambio, pronto descubrirá que la relación se hace más fácil y más fluida y que la otra persona parece hacerse más agradable y que se comunica más fácilmente con usted. Eventualmente, descubrirá que el problema acaba por resolverse completamente, de uno u otro modo, en beneficio de ambas partes.
Conviene, sin embargo, señalar que esta técnica no puede ser utilizada para «controlar» el comportamiento de los demás o hacer que hagan algo en contra de su voluntad. Lo que esta técnica consigue es disolver nuestras barreras internas que se hallan en oposición a la armonía natural y a nuestra realización, permitiendo que nos manifestemos en nuestros aspectos más positivos.
Para utilizar la visualización creativa no es necesario tener ninguna creencia metafísica o espiritual, aunque es necesaria la disposición a aceptar la realidad de algunos conceptos. Pero no es necesario "tener fe" en ningún poder externo a nosotros.
Lo que sí es verdaderamente necesario es albergar el deseo de enriquecer nuestros conocimientos y experiencia, y una mente lo suficientemente abierta para probar algo nuevo con una actitud positiva.
Estudie los principios y ensaye las técnicas con la mente y el corazón abierto, y juzgue entonces por sí mismo si le son o no útiles.
Si llega a la conclusión de que son valiosos, siga utilizándolos y muy pronto los cambios que se producirán en usted y en su vida excederán probablemente de todo lo que pudo haber soñado.
Cómo funciona la visualización creativa
Para comprender cómo funciona la visualización creativa es útil considerar varios principios interrelacionados:
El Universo físico es energía
Nuestro universo físico no está realmente compuesto de ninguna «materia» en absoluto. Su componente básico es un tipo de fuerza o esencia que podemos llamar energía.
Las cosas parecen ser sólidas y estar separadas unas de otras en el nivel en el que nuestros sentidos físicos suelen percibirlas. Sin embargo, a niveles más sutiles como, por ejemplo, el atómico y el subatómico, la materia aparentemente sólida se ve como partículas más y más pequeñas dentro de otras partículas que, a la postre, acaban por no ser otra cosa que pura energía.
Físicamente, todos somos energía, y todo lo que hay en nosotros y lo que nos rodea está hecho de energía. Percibimos todas las cosas como separadas unas de otras, como algo sólido, cuando, en realidad, no son más que diversas formas de nuestra energía esencial que es común a todo.
La energía vibra a diferentes velocidades y, por lo tanto, presenta distintas características, que la hacen más sutil o más densa. El pensamiento es una forma de energía relativamente sutil y ligera y, por lo tanto, muy rápida y sensible a los cambios. La materia es una energía relativamente densa y compacta y, por lo tanto, más lenta para moverse y cambiar. Todas las formas de energía están in-terrelacionadas y se afectan unas a otras.
La energía es magnética
Una de las leyes de la energía dice que una energía de determinadas características y vibración tiende a atraer energía de características y vibración similares.
El pensamiento y los sentimientos tienen su propia energía magnética de naturaleza similar. Podemos observar este principio en la práctica, cuando, por ejemplo, nos encontramos «por casualidad» con alguien en quien acabábamos de pensar, o cuando tomamos «al azar» un libro que contiene la información que precisamente necesitábamos en aquel momento.
La acción sigue a la idea
El pensamiento es una forma de energía rápida, ligera y móvil. Se manifiesta instantáneamente, a diferencia de otras formas de energía más densa como la materia.
Cuando creamos algo, siempre lo creamos en primer lugar en forma de pensamiento. El artista primero tiene una idea o inspiración y luego crea, por ejemplo, un cuadro. El arquitecto hace en primer lugar un diseño y luego, sobre los planos que ya tiene elaborados construye la casa.
La idea es como una película fotográfica: crea una imagen de la forma que luego se magnetiza y conduce la energía física para que fluya en esa forma y pueda llegar a manifestarse en el plano físico.
Este principio sigue siendo válido aunque no emprendamos una acción física directa para que nuestras ideas se materialicen. El mero hecho de tener una idea o pensamiento alojados en nuestra mente es una energía que tenderá a atraer y crear la forma en el plano material. Si pensamos constantemente en la enfermedad, podemos acabar enfermando. Si pensamos en nosotros mismos como algo hermoso, acabaremos siéndolo.
La ley de la radiación y de la atracción
Este principio afirma que todo lo que proyectamos hacia el universo vuelve de algún modo a reflejarse en nosotros. "Se recoge lo que se siembra."
Desde el punto de vista práctico, esto significa que siempre atraemos a nuestras vidas aquello en lo que más intensamente pensamos, aquello en lo que creemos con mayor fuerza, lo que ansiamos más profundamente, lo que imaginamos de un modo más real.
Cuando tenemos una actitud negativa o temerosa, insegura o ansiosa, tendemos a crearlas mismas experiencias, situaciones o personas que estamos tratando de evitar. Si adoptamos una actitud básicamente positiva, confiando y entreviendo el placer, la satisfacción y la felicidad, atraeremos y crearemos situaciones, acontecimientos e incluso personas, conforme a nuestras expectativas más positivas. Por lo tanto, cuanto más energía positiva pongamos en imaginar lo que deseamos, antes empezará a manifestarse en nuestras vidas.
La utilización de la visualización
El proceso de cambio no se produce a niveles superficiales por medio del simple "pensamiento positivo". Implica explorar, descubrir y modificar nuestras más profundas actitudes básicas respecto a la vida. Esta es la razón por la que aprender a utilizar la visualización creativa puede convertirse en un proceso de profundo y significativo desarrollo. En este proceso descubrimos a menudo algunas vías en las que nosotros mismos nos hemos frenado, bloqueándonos para lograr la satisfacción y la realización en la vida, debido a nuestros temores y conceptos negativos. Pero cuando las vemos claramente, estas actitudes pueden quedar "disueltas" a través del proceso de la visualización creativa, dejándonos espacio para encontrar y vivir nuestro natural estado de plenitud, felicidad, realización y amor.
Este es el fin último de la visualización creativa: hacer de cada momento de nuestras vidas, un momento de creación maravillosa, en el que de forma natural elegimos lo mejor, lo más hermoso, la vida más plena que podamos imaginar.
Cómo visualizar
Mucha gente se pregunta lo que se quiere decir exactamente con el término visualizar. Algunos se preocupan porque no "ven" realmente nada cuando cierran los ojos y tratan de visualizar una imagen mental.
No se aferré al término "visualizar". No es en absoluto necesario ver mentalmente una imagen. Algunos dicen ver muy claramente nítidas imágenes cuando cierran los ojos e imaginan algo. Otros tienen la sensación de que no «ven» realmente nada. Se limitan a "pensar en ello", a imaginar que están mirándolo, o a sentir conscientemente la impresión de un sentimiento. Es absolutamente normal. Todos usamos nuestra imaginación constantemente. Es imposible no hacerlo y, por lo tanto, cualquiera que sea el proceso que imaginemos estar experimentando, es perfectamente normal y positivo.
Si todavía no está seguro de lo que significa visualizar, lea atentamente el siguiente ejercicio, cierre los ojos y hágalo a continuación.
Cierre los ojos y relájese profundamente durante unos minutos. Piense en alguna habitación que le sea muy familiar. Recuerde algunos detalles que le sean especialmente familiares, como el color de la alfombra, la disposición de los muebles, la iluminación. Imagínese entrando en la habitación y sentándose en una silla o echándose en un cómodo sofá o en la cama.
Evoque entonces alguna experiencia agradable que haya tenido en días pasados, especialmente alguna relacionada con sensaciones físicas tales como una comida deliciosa, un masaje, nadar en agua estupenda o hacer el amor. Evoque la experiencia lo más vividamente posible y vuelva a disfrutar de sus agradables sensaciones.
Imagine entonces que se encuentra en algún paraje idílico, relajándose quizá sobre la suave y verde hierba junto a un río de aguas cristalinas, o atravesando un bosque exuberante. Puede que sea un lugar en el que haya estado o un lugar ideal al que le gustaría ir. Piense en los detalles e imagínelo en todos los aspectos tal como le gustaría.
Cualquiera que sea el proceso que haya utilizado para llevar estas escenas a su mente, será su propio medio de "visualizar".
Luego, conservando la idea o imagen en su mente, haga algunas afirmaciones totalmente positivas (en voz alta o en silencio, como prefiera) acerca de la circunstancia imaginada:
Aquí me tienen, pasando un maravilloso fin de semana en la montaña. Qué días más maravillosos.
Ahora sí que tengo una relación feliz y maravillosa con X. Estamos realmente aprendiendo a comprendernos.
Termine siempre su visualización haciéndose esta rotunda afirmación:
Esto, o algo mejor, se hace realidad de un modo satisfactorio y armonioso para el bien de todos a quienes afecta.
Esto deja lugar para algo distinto e incluso mejor de lo que en principio había deseado que sucediera, y le sirve como recordatorio de que este proceso sólo funciona para beneficio de todas las personas a las que implica. De hecho, hay dos medios distintos para llegar a la visualización creativa. Uno es receptivo y el otro es activo. En el receptivo nos limitamos a relajarnos y a dejar que las imágenes o impresiones lleguen a nosotros sin elegir los detalles; las tomamos tal como vienen. En el activo creamos y elegimos conscientemente lo que deseamos ver e imaginar. Ambos procesos son una parte importante de la visualización creativa, y tanto nuestra receptividad como nuestra actividad se ven reforzadas con la práctica.
Problemas especiales de la visualización
A veces, algunas personas tienen completamente bloqueada su capacidad para visualizar o imaginar a voluntad y, sencillamente, tienen la sensación de que «no pueden hacerlo». Este tipo de bloqueo suele proceder de algún temor, el cual, en realidad puede terminar por ser superado si la persona lo desea de verdad.
Se bloquea la capacidad para usar la visualización creativa por el temor a lo que se pueda encontrar al mirar al interior (el temor a los propios pero desconocidos sentimientos y emociones).
En una ocasión, y en una de mis clases, un hombre se mostraba totalmente incapaz de visualizar y se quedaba sistemáticamente dormido durante las meditaciones. Luego resultó que había tenido una experiencia profundamente emotiva durante un proceso de visualización y tenía miedo de emocionarse demasiado delante de los demás.
Lo cierto es que no hay nada en nuestro interior que pueda herirnos. Es solamente nuestro temor a experimentar nuestros propios sentimientos lo que puede bloquearnos.
Si durante la meditación sucede algo inesperado, lo mejor es hacerle frente de modo total, asumirlo y experimentarlo tanto como pueda; acabará descubriendo que pierde el poder negativo que pueda tener sobre usted. Nuestros temores proceden de cosas que no afrontamos. En cuanto nos mostramos dispuestos a mirar intensa y profundamente a la fuente de nuestro temor, pierde su poder.
Afortunadamente, esos problemas se presentan raramente en la visualización. Por lo general, la visualización creativa llega de un modo natural, y cuanto más la practicamos, más fácil se hace.
Decida su objetivo
Decida sobre algo que le gustaría tener, algo sobre lo que le gustaría trabajar, realizar o crear. Puede situar su objetivo a cualquier nivel: una casa, una relación, un cambio en su personalidad, mejor salud, o cualquier otra cosa.
Al principio, elija objetivos en los que le sea bastante fácil creer, cuya realización crea usted posible en un futuro inmediato. De este modo no tendrá que vencer en sí mismo demasiadas resistencias negativas y podrá llevar al máximo su sensación de éxito en el proceso de aprendizaje de la visualización creativa. Luego, cuando tenga más práctica, podrá ir planteándose objetivos más problemáticos y difíciles.
Cree una imagen o idea clara
Cree una idea o imagen mental del objeto o situación exactamente como lo desea. Debe pensar en ello en presente, como si ya existiese lo que usted quiere que exista. Imagínese en esa situación tal como la desea e incluya tantos detalles como pueda.
Concéntrese a menudo en ello
Evoque a menudo su idea o imagen mental, tanto en los momentos de tranquila meditación como espontáneamente siempre que le surja la idea a lo largo del día, idea que, de este modo, se convierte en parte integrante de su vida, se le hace más real y la proyecta de un modo más fecundo.
Transmítale energía positiva
Al concentrarse en su objetivo piense en él de un modo positivo y animoso. Hágase rotundas afirmaciones positivas: que existe, que ya lo ha conseguido o que lo va a conseguir. Véase a sí mismo en el momento de recibirlo o lograrlo. Mientras hace estas afirmaciones destierre cualquier duda o desconfianza que pueda albergar, por lo menos en ese momento, y habitúese a albergar el sentimiento de que lo que usted desea es real y posible.
Prosiga avanzando en este proceso hasta que logre su objetivo o hasta que deje de desearlo. Recuerde que los objetivos suelen cambiar antes de haberse conseguido, algo que es connatural al proceso humano de cambio y desarrollo. Por lo tanto, no trate de prolongarlo más allá de sus energías. Si usted pierde interés puede significar que ha llegado el momento de reconsiderar sus deseos.
Si uno de sus objetivos cambia, asegúrese de que es realmente así. Vea claro en su mente que ya no se concentra en su anterior objetivo. Dé por concluido el ciclo de su anterior objetivo y empiece un nuevo ciclo. Esto le ayudará a evitar la confusión o a que llegue a sentirse como si hubiese «fracasado» cuando lo que sucede es que, simplemente, ha cambiado.
Cuando logre un objetivo, asegúrese de tener el consciente convencimiento de que ha sido realmente conseguido.
Con frecuencia, logramos cosas que hemos estado deseando y visualizando sin apenas advertir nuestro éxito. Por lo tanto, felicítese por ello y no deje de darle las gracias al universo por haber hecho realidad sus deseos.
Las afirmaciones
Las afirmaciones son unos de los elementos más importantes en la Visualización Creativa. Afirmar significa "hacer firme". Una afirmación es un pensamiento fuerte y positivo acerca de que algo ya es así. Es una manera de “confirmar” la existencia de aquello que está usted imaginando.
La mayoría de nosotros estamos conscientes del hecho de que sostenemos un "diálogo" interior casi constante en nuestras mentes. La mente está ocupada "hablándose" a sí misma, comentando sin cesar acerca de la vida, el mundo, nuestros sentimientos, nuestros problemas, otras personas, etc.
Las palabras e ideas que nos pasan por la mente son muy importantes. La mayor parte del tiempo no nos damos cuenta, de manera consciente, de este flujo de pensamientos, y sin embargo aquello que nos "decimos a nosotros mismos" mentalmente es la base sobre la que formamos la experiencia de nuestra realidad. Nuestros comentarios mentales influencian y afectan nuestros sentimientos y percepciones acerca de lo que pasa en nuestras vidas y son estas formas de pensamiento las que al final atraen y crean todo lo que pasa alrededor de nosotros.
Cualquiera que haya practicado la meditación, sabe cuán difícil puede ser acallar esta "conversación mental" interna, para poderse conectar con nuestra mente mas sabia, profunda e intuitiva. Una práctica tradicional de meditación, es simplemente observar el diálogo interno con tanta objetividad como sea posible.
Esta es una valiosa experiencia puesto que le permite crear conciencia real de los tipos de pensamientos que habitualmente cruzan por su mente. Muchos de estos pensamientos son como grabaciones de viejos patrones que han regido nuestras vidas. Son "programaciones" viejas que registramos hace mucho tiempo que aún influencian lo que nos acontece hoy en día.
El practicar las afirmaciones nos permite empezar a reemplazar algo de la plática echada a perder, agotada o negativa que llevamos en la mente y sustituirla por ideas y conceptos más positivos. Es una técnica poderosa, la cual en poco tiempo puede transformar nuestras actitudes y expectativas acerca de la vida, y por tanto cambiar en su totalidad aquello que nos hemos creado.
Las afirmaciones pueden efectuarse en silencio, en voz alta, por escrito e incluso por medio de cantos o recitaciones. Diez minutos al día de afirmaciones efectivas pueden contrarrestar incluso años de viejos hábitos mentales. Naturalmente, mientras más frecuentemente procure estar consciente de lo que se está diciendo a sí mismo y elija palabras y conceptos positivos e importantes, más positiva será la realidad que cree.
Una afirmación puede ser cualquier pensamiento positivo. Puede ser muy general o muy o muy específico. Existen una infinidad de posibles afirmaciones. He aquí sólo unas cuantas para darle algunas ideas:
♦ Todo llega hacia mífácilmente y sin esfuerzo.
♦ Me siento radiante y estoy Heno de luz y amor.
♦ Tengo todo lo que necesito para disfrutar aquí y ahora.
♦ Todo lo que necesito está ya en mi interior.
♦ Acepto todos mis sentimientos como parte de mí mismo.
♦ Cuanto más me amo a mí mismo más amor puedo dar a los demás.
♦ Actualmente recibo amor con prodigalidad.
♦ Atraigo hacia mí y hacia mi vida relaciones de amor, de satisfacción y de felicidad.
♦ Mi relación con X es cada vez más feliz y más plena.
♦ Me encanta hacer mi trabajo,y me siento recompensado con creces, tanto creativa como económicamente.
♦ Soy un canal abierto de energía creadora.
♦ Consigo expresarme tal como soy, con pleno dinamismo.
♦ Siempre estoy en el lugar preciso en el momento oportuno, llevando a cabo con éxito lo que hay que hacer.
♦ El universo es rico y hay para todos.
♦ Cuanto más doy, más recibo y más feliz me siento.
♦ Me encuentro relajado y centrado,y tengo tiempo para todo.
♦ Ahora disfruto de todo lo que hago.
♦ Me siento feliz y venturoso sólo por el hecho de vivir.
♦ Me siento con una salud perfecta y radiante de belleza.
♦ Estoy abierto para recibir todas las bendiciones de este pródigo universo.
♦ La luz divina que hay en mi interior está produciendo perfectos resultados en cada fase de mi vida actual.
♦ Es estupendo tener todo lo que necesito.
♦ Ahora todo se está desarrollando bien en mi vida.
Puntos importantes acerca de las afirmaciones:
1. Siempre enuncie sus afirmaciones en tiempo presente, no en futuro. Es importante creerlas como si ya existieran. No diga: “Tendré un magnífico empleo”, sino: “Ahora tengo un magnífico empleo”. No se está mintiendo a sí mismo; solamente está reconociendo el hecho de que todo se crea en “primer lugar” en el plano mental, antes de manifestarse como una realidad objetiva.
2. Siempre enuncie sus afirmaciones de la manera más positiva que pueda. Afirme lo que desea, no lo que no desea. No diga: “Ya no me quedo dormido en las mañanas”, sino “Ahora despierto a tiempo y lleno de energía cada mañana”. Esto le asegura que está creando la imagen mental más positiva posible. En ciertos momentos le parecerán útiles las afirmaciones negativas, especialmente al tratar de borrar bloqueos emocionales específicos, o malos hábitos. Por ejemplo: “No es necesario que me ponga nervioso para lograr hacer algo”. De ser así, deberá continuar siempre este tipo de afirmación con una positiva que describa aquello que desee crear. Por ejemplo: “Ahora permanezco profundamente relajado y tranquilo, y todo se logra fácilmente y sin esfuerzo”.
3. En general, mientras más simple y corta la afirmación, más efectiva. Una afirmación debe ser un pensamiento claro que proyecte un sentimiento profundo, mientras más sentimiento proyecte, mayor será la impresión que haga en su mente. Las afirmaciones largas, de muchas palabras o de mucha teoría pierden su impacto emocional y terminan por confundirlo.
4. Elija siempre afirmaciones con las que se sienta usted verdaderamente cómodo. Lo que funciona para una persona, no necesariamente le funcionará a otra. Una afirmación debe sentirse como algo que es positivo, expansivo, liberador y / o como un apoyo. Si no es así, busque otra, o trate de cambiar las palabras hasta que se sienta a gusto. Por supuesto, podría darse el caso de que emocionalmente se sienta incómodo con cualquier afirmación que utilice por primera vez, en especial si ésta le causa gran efecto o si va a provocar un cambio importante en su subconsciente. Esto es simplemente la resistencia inicial de su ego contra el crecimiento y el cambio.
5. Recuerde siempre que al hacer una afirmación usted está tratando de crear algo nuevo y fresco. No está tratando de remendar ni de cambiar algo que ya existe. El hacerlo significaría presentar resistencia a lo que es, lo cual traería consigo conflicto y lucha. Asuma la actitud de aceptación y de que puede manejar cualquier cosa que ya exista en su vida, y al mismo tiempo de que cada momento es una nueva oportunidad para comenzar a crear exactamente aquello que usted desea y que lo hará feliz.
6. Las afirmaciones no tienen el propósito de contradecir o de tratar de cambiar sus sentimientos y emociones. Es importante aceptar y experimentar todos sus sentimientos incluyendo aquellos que se consideran “negativos”, sin tratar de cambiarlos. Al mismo tiempo las afirmaciones pueden ayudarle a crear un nuevo punto de vista acerca de la vida, que le permita obtener más y más experiencias satisfactorias de aquí en adelante.
7. Al utilizar las afirmaciones, trate lo más posible de creer en ellas, de que su experiencia puede convertirse en realidad. Durante un rato ( aunque sean unos minutos ) suspenda todas sus dudas y titubeos, y utilice todo su poder mental y su energía emocional en ellas. Si hay dudas, resistencia o pensamientos negativos que están interfiriendo con sus afirmaciones, utilice uno de los procesos de eliminación o alguna de las afirmaciones que aparecen en la Cuarta Sección de este libro. Más que recitar una afirmación de memoria, trate de sentir que realmente tiene el poder para hacerla realidad ( ¡Y de verdad lo tiene! ). Esto hará una gran diferencia en su efectividad.
Las afirmaciones pueden usarse solas o en combinación con visualizaciones o imaginaciones. Incluya siempre las afirmaciones en sus períodos normales de meditación de Visualización Creativa. Las afirmaciones son más poderosas e inspiradas cuando incluyen referencias a fuentes espirituales. La mención de Dios, Cristo, Buda o cualquiera de los Grandes Maestros, añade energía espiritual a su afirmación y reconoce la fuente universal de todas las cosas. Podría preferir utilizar frases como Amor Divino, La Luz que hay dentro de Mí, o el conocimiento universal.
Fuentes: