“Es emocionante hacer historia aventurándonos en el mundo a través de la oración. Hay muchas cosas de las que no hablo porque tengo miedo que el Creador deje de ayudarme. Al principio mi gente podía hacerse invisible, cambiar de forma y hablar con los animales. Creo que comenzaron a abusar de ese don y que por eso el Creador nos lo arrebató. Por esto trato de tener cuidado."
"Viajo por muchas tierras diferentes siendo “la voz de los sin voz”. Todas las cosas creadas necesitan una voz. Me llaman para rezar por los tigres de Bengala, por animales en África, por los lobos, por el salmón o por el río Ganges de India. Fui a Australia para rezar por la polución del río Murry Darling. Recé por los Cóndores y ahora están regresando después de haberse ido de Oregón hace ya más de 200 años.
"Mi tribu me envía a lugares que necesitan oraciones y bendiciones. Me envían a bautizar un barco, a entierros, a ser testigo de monumentos o a luchar por la vida de alguna planta especial. He sido llamada para conducir oraciones con el propósito de detener la tala de árboles y presionar en Washington para salvar nuestro Monumento Siskiyou, aquí en Oregón, donde habitan especies vegetales que no crecen en ninguna otra parte del mundo. Hasta ahora hemos tenido éxito. Seguiremos luchando para salvar algunos de nuestros hermosos enclaves espirituales. Los rezos ayudarán.
"Soy la mujer viva más vieja de los indios del río Rogue que vivieron en el sur de Oregón durante más de 20.000 años. Como miembro de mi tribu -las Tribus Confederadas de los Indios Siletz- por muchos, muchos años he servido en comités tribales, siempre luchando por mejoras culturales y tradicionales. Mis hijos y yo somos nativos tradicionales de la Primera Nación y "andamos nuestras palabras". He estado a las puertas de la muerte y he sobrevivido al cáncer desde 1982. Pedí a mi Creador que me dejara vivir porque mi familia me necesita y tengo mucho por hacer. Le dije "si me dejas vivir me mantendré ocupada el resto de mi vida". ¡Y ciertamente lo estoy!
"Hace años, cuando tenía aproximadamente cuarenta y cinco, experimenté una gran agitación. Una sensación que no sólo estaba presente despierta sino también durante el sueño. Una fuerza tiraba de mí hacia el camino espiritual. Me dijeron que tenía que limpiar mi interior. Finalmente hice lo que llamo "morir a mí", pero primero luché contra este llamado interior pensando que yo no era digna. Mirando hacia atrás, sin embargo, puedo ver cuando empecé a cambiar. Comencé a darle vueltas al asunto y fui a ver a mis seis hijos y les pedí que me perdonaran cualquier daño que les hubiera causado. Les pedí que me expresaran cualquier cosa que me quisieran decir. Les dije cuánto los amaba y que rezaría por ellos. Sé que he cometido errores como madre -no había ninguna escuela para padres a la que ir.
"Sin embargo, todavía no me había comprometido a recorrer el "camino espiritual". Todavía discutía con mi Creador. Finalmente un día un amigo que es psiquiatra, me dijo que dejara de luchar contra este camino, que me resignara y simplemente lo hiciera. Así lo hice. Fue como si me hubieran sacado una gran carga de encima.
"Hay una historia transmitida por mi gente que dice que el único deber que nos dejaron los antiguos era el deber de orar, así que me hice una mujer de oración. El Creador me ha contestado muchas y muchas oraciones y yo me siento bendecida porque se me permite ser una mediadora.
"La oración es necesaria en todo el mundo. Es tiempo de avanzar hacia adelante y unir nuestras plegarias con la gente de todo el planeta. Juntos podemos detener el abuso de mujeres y la vejación a los niños, el hambre, el abuso de la tierra. Juntos podemos proteger nuestras plantas medicinales y sanar el consumo de drogas. Podemos unirnos más allá nuestras creencias religiosas o espirituales. Podemos unirnos y luchar para salvar a nuestra Madre Tierra y con ella nuestra propia existencia.
"Es tiempo de pasar a la acción si queremos ayudar. Debemos apoyarnos y darnos coraje unos a otros, y a todos los que encontremos en nuestro camino. Debemos amar a la gente incondicionalmente y sumar sus voces y sus oraciones a lo nuestros. La gente necesita ser alentada a usar su voz. El Creador oirá nuestras súplicas, apartará el lado oscuro y hablará con los terroristas. Juntos podemos crear la diferencia.
"Sí, tenemos mucho trabajo que realizar para tener armonía y paz, pero podemos hacerlo si trabajamos juntos. Juntos tenemos dones para ofrecer enseñando lo que es sagrado. Estamos todos juntos en esta "canoa agujereada", así que tenemos que ser una fuerza unida para ser escuchados y continuar la lucha hasta que nuestros "corazones estén en la tierra"
"Aho! Bendiciones
Camina en la belleza
Amorosamente,
Abuela Agnes Baker-Pilgrim"
No hay comentarios:
Publicar un comentario